Mandato cultural o placer exótico, una de las acciones obligadas para cualquier turista que visita por primera vez Tucumán es la de probar el singular sabor de una Mirinda manzana. Elixir edulcorado y burbujeante, siempre ponderado por su maridaje ideal con el sánguche de milanesa autóctono, el sabor de la popular bebida es exclusivo de nuestra provincia en todo el territorio nacional. Así al menos lo destaca una publicación que suscita una encendida polémica en las redes sociales ¿Verdad o mito?
En el idioma esperanto Mirinda significa “maravilloso, sorprendente o admirable”. Adjetivo que cualquiera emplearía ante el primer y anhelado trago a esta gaseosa propiedad de PepsiCo cuyos orígenes se remontan a 1957 en España, país donde la marca fue registrada por primera vez. Característica por su gusto frutal, de acuerdo al país o región del mundo, la bebida se comercializa en los siguientes sabores: limón, naranja, pomelo, manzana, fresa, ananá, banana, guaraná y uva. Algunos de ellos son muy populares y extendidos, como es el caso de la Mirinda naranja. Otros, más excepcionales y propios de algunas latitudes del globo terráqueo, como sucede con la Mirinda manzana.
“Una curiosidad: el único lugar donde se consigue la Mirinda manzana en Argentina es en Tucumán”, afirma en una publicación de Twitter la cuenta @Luis_Cas22. Si bien la información acerca de la gaseosa disponible en Wikipedia confirma esta afirmación, muchos usuarios aseguran que es posible conseguir la popular bebida en otras provincias del norte del país e incluso en Buenos Aires. De hecho, de acuerdo con los datos que aporta la misma página web, el sabor manzana de la Mirinda es bastante difícil de conseguir en todo el mundo y sólo se la encuentra en algunos países como Argelia, Colombia y Marruecos.
“Oficialmente Tucumán es el primer mundo”, escribió Genaro inflando el pecho de orgullo ante la condición de singularidad que ostenta la Mirinda manzana en el territorio provincial. “Una cosa buena tenía que tener Tucumán”, publicó Marina por su parte. “Incomparable Tucumán”, chapeó Micaela. Puede que la provincia carezca de playas con salida al mar, estadios mundialistas o tren bala, pero, para orgullo de los nativos y envidia de los foráneos, tenemos Mirinda manzana.