La Cámara de Diputados rechazó este miércoles el veto presidencial de Javier Milei a la Ley de Emergencia en Discapacidad, en una votación que terminó siendo un duro revés para el Gobierno. La oposición logró reunir la mayoría especial de dos tercios, con 172 votos afirmativos frente a 73 rechazos y 2 abstenciones, lo que permitió insistir en la anulación del veto y restituir la normativa que busca actualizar aranceles por inflación y crear una pensión no contributiva equivalente al 70% del haber mínimo.
En Tucumán, la votación dejó en evidencia la división de la delegación provincial en el Congreso. A favor de rechazar el veto se pronunciaron los peronistas Carlos Cisneros, Pablo Yedlin, Elia Fernández, Agustín Fernández y Gladys Medina, junto con el radical Roberto Sánchez. En contra se manifestaron el libertario Gerardo Huesen, el radical Mariano Campero y la diputada de CREO, Paula Omodeo.
El Gobierno había vetado la norma con el argumento de su alto costo fiscal. Sin embargo, antes de la sesión, el vocero presidencial Manuel Adorni intentó suavizar el debate anunciando en redes sociales que “se está considerando un aumento en todas las prestaciones destinadas a personas con discapacidad” y que la prioridad es “fortalecer las prestaciones médicas, terapéuticas y de apoyo”. La estrategia no alcanzó para frenar la decisión opositora.
Durante la sesión, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, recordó que para habilitar el tratamiento de cada veto y para rechazarlo era necesario alcanzar los dos tercios de los votos. Finalmente, la oposición lo consiguió, dejando en claro la pérdida de apoyo del oficialismo en el Congreso y la fuerza del reclamo en favor de las personas con discapacidad.




