La delegada comunal de Las Cejas, Cristina Contreras, respondió públicamente este lunes a las acusaciones impulsadas por el dirigente peronista Enrique Romero y aseguró que se trata de denuncias “maliciosas y políticas” en su contra. En diálogo con LA GACETA, afirmó que no tiene nada que esconder, que está a disposición de la Justicia y que desde 2011 ocupa su cargo por elección popular.
Contreras recordó que en 2018 su casa fue allanada por una causa vinculada a supuestas retenciones de tarjetas de vecinos, pero resaltó que “no encontraron nada, porque no había nada”. También señaló que las denuncias actuales forman parte de un “complot político” impulsado por dirigentes que fueron sus rivales en elecciones anteriores, como Ariel Figueroa y el ex delegado comunal Martín Medina.
Respecto a la acusación de que empleados de la comuna habrían trabajado en su vivienda y en la de su hija en El Cadillal, la delegada fue contundente: “Es mentira. Mis empleados jamás estuvieron en mi domicilio. Se trata de un ataque mediático y político”. Además, anunció que denunciará a Enrique Romero por hostigamiento, acusándolo de perseguir a su familia.
Sobre las observaciones del Tribunal de Cuentas, Contreras aseguró que no teme ser investigada y que no hay irregularidades en su gestión. Finalmente, destacó que durante sus tres mandatos Las Cejas logró transformarse con obras de infraestructura, iluminación y mejoras en la ruta de acceso. “Quiero darle tranquilidad al pueblo: no hay nada ilegal en la comuna. Si alguien quiere ocupar mi lugar, que lo haga en las urnas en 2027”, concluyó.
Fuente: La Gaceta
