Este miércoles en la Cámara de Diputados, el Gobierno de Javier Milei consiguió mantener el veto presidencial a la ley que establecía un aumento del 7,2% en jubilaciones y pensiones, además de la suba del bono de $70.000 a $110.000. La votación terminó con 160 votos a favor del proyecto original de la oposición y 83 en contra, pero las seis abstenciones y ocho ausencias elevaron el número necesario para alcanzar los dos tercios, lo que impidió revertir el veto.
En contra de la decisión oficial votaron Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la Coalición Cívica, el Frente de Izquierda y un sector de la UCR. Del otro lado, La Libertad Avanza y el PRO se mantuvieron unidos, acompañados por algunos radicales, para sostener la postura del Gobierno.
Las abstenciones fueron decisivas: María Eugenia Vidal, cuatro diputados misioneros de Innovación Federal y la entrerriana Marcela Antola optaron por no definir su voto, lo que aumentó el umbral requerido de 160 a 166 apoyos para rechazar el veto. Como la oposición no alcanzó ese número, la medida presidencial quedó firme.
También influyeron las ausencias de ocho legisladores, entre ellos Manuel Aguirre (Democracia para Siempre), Tanya Bertoldi y Dante López Rodríguez (Unión por la Patria), Agustín Domingo (Innovación Federal), Gerardo González y Florencia Klipauka (La Libertad Avanza) y Silvia Lospennato (PRO). Todas estas ausencias terminaron beneficiando al oficialismo.
El resultado llegó pocas horas después de que la oposición consiguiera un triunfo con 172 votos a favor y 73 en contra al rechazar el veto presidencial a la Ley de Emergencia en Discapacidad, que ahora deberá ser tratada en el Senado y ratificada con la misma mayoría especial.
