Julieta Makintach, jueza del Tribunal en lo Criminal N°2 de San Isidro, presentó este lunes su renuncia tras quedar envuelta en una polémica por participar en un proyecto audiovisual sobre el juicio por la muerte de Diego Maradona. La decisión se conoció mientras avanzaba el jurado de enjuiciamiento que debía evaluar su conducta profesional, lo que ahora queda suspendido.
La controversia comenzó cuando se supo que Makintach había sido contratada por una productora para grabar una serie documental sobre el juicio, mientras ella seguía siendo parte del tribunal. Esto generó fuertes críticas y llevó a la Corte Suprema de Justicia de la provincia de Buenos Aires a otorgarle una licencia de 90 días y apartarla del caso el pasado 29 de mayo.
El jurado de enjuiciamiento ya había aceptado ocho denuncias en su contra, incluyendo la del procurador Julio Conte Grand. Frente a esto, la magistrada decidió renunciar para evitar que el proceso continúe, aunque aclaró en su carta que no renuncia a su derecho a defenderse.
En el texto presentado, Makintach reconoció que su participación en el documental provocó un daño institucional y afectó la confianza pública en la Justicia. Explicó que su salida busca “reparar los errores cometidos” y expresó su compromiso con los valores republicanos y la ética judicial.
