Tras la derrota del oficialismo en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, reconoció este lunes la necesidad de una autocrítica profunda dentro del Gobierno y admitió que, aunque existen avances en la macroeconomía, estos no se reflejan en la vida diaria de la gente, lo que genera desconfianza hacia las políticas implementadas.
Francos aseguró que “ayer sufrimos un viento muy fuerte” y remarcó que es momento de analizar qué falló y por qué los resultados económicos no llegan a los ciudadanos. También reconoció que desde el Gobierno pudieron haber transmitido una imagen de soberbia y señaló la necesidad de “rectificar los caminos” de cara al futuro.
En cuanto a los próximos pasos, adelantó que el Gabinete pondrá el foco en las elecciones de octubre, claves para conseguir la mayoría legislativa necesaria que permita avanzar con reformas en materia laboral y tributaria. Aunque el ministro de Economía, Luis Caputo, ratificó la continuidad del rumbo económico, Francos aclaró que se busca sostener el equilibrio fiscal y la política cambiaria con el objetivo de controlar la inflación.
El jefe de Gabinete asumió la derrota como una responsabilidad compartida de todo el equipo y reconoció que no supieron transmitir con claridad los logros alcanzados. Además, evitó confirmar si el Presidente se comunicará con el gobernador Axel Kicillof tras su victoria, pero se mostró optimista respecto al futuro y confió en que el Gobierno podrá corregir errores y mejorar su comunicación con la sociedad.




