Después de 48 horas sin transporte público, los colectivos volvieron a circular con normalidad desde la medianoche de este viernes, luego de que la intendenta Rossana Chahla lograra un acuerdo con los empresarios de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) para levantar las suspensiones a los choferes, motivo que había generado el paro convocado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
El entendimiento se firmó tras una reunión encabezada por la jefa municipal, junto a funcionarios del Concejo Deliberante, las secretarías de Movilidad Urbana, Gobierno y Hacienda, y los representantes de AETAT. El convenio consta de cuatro cláusulas, entre ellas el pago a las empresas de los Atributos Sociales SUBE, una compensación retroactiva de $1.000 millones mensuales por el Boleto Educativo Municipal, y la suspensión de sanciones económicas por los días de paro.
Durante el anuncio, Chahla destacó el esfuerzo conjunto que permitió destrabar el conflicto:
“Nosotros entendemos la situación económica del país, de los empresarios y también del Municipio. Este es un esfuerzo muy grande, pero lo hacemos para que la gente pueda viajar, ir a la escuela, a la universidad o al hospital”, expresó.
Además, la intendenta pidió a las empresas cumplir con la frecuencia y regularidad del servicio. “Los vecinos están cansados y molestos. Queremos que se respeten los horarios y recorridos porque trabajamos intensamente para resolver este conflicto y escuchar los reclamos de la gente”, subrayó.
El acuerdo pone fin a una crisis que mantuvo paralizadas 13 de las 14 líneas urbanas durante dos días y afectó a miles de usuarios. Desde el Municipio remarcaron que el entendimiento alcanzado “no es una solución definitiva, pero sí un paso importante para garantizar el funcionamiento del transporte y evitar nuevos paros en la ciudad”.
