La mañana del lunes comenzó con indignación en Santa Lucía, Tucumán, luego de que el Santa Lucía Fútbol Club denunciara que durante la madrugada fue víctima de un robo. Delincuentes forzaron la entrada del túnel del estadio y se llevaron elementos importantes para el funcionamiento diario del club, afectando especialmente a los niños y adolescentes que participan en sus actividades deportivas y sociales.
El hecho fue denunciado ante el Ministerio Público Fiscal de Tucumán y ya está siendo investigado. Desde el club expresaron su bronca e impotencia por lo sucedido, ya que, más allá del valor económico, lo robado tiene un gran valor simbólico y social. “No se trata solo de objetos materiales, sino de herramientas que usamos todos los días para trabajar con nuestros chicos y darles algo tan simple pero tan valioso como una merienda”, señalaron en sus redes sociales.
Entre los elementos robados hay una pava eléctrica, un termo, pelotas de fútbol, bebidas y otros objetos de uso diario que forman parte tanto de los entrenamientos como de las meriendas que el club ofrece a los chicos luego de cada práctica. Desde la institución destacaron que estos elementos cumplen una función nutricional y emocional para los jóvenes del barrio.
El robo ocurrió durante la madrugada, cuando los delincuentes forzaron la entrada al túnel del estadio, según confirmaron fuentes judiciales. Se espera que en las próximas horas se revisen las cámaras de seguridad de los alrededores para tratar de identificar a los responsables.
El club pidió ayuda a la comunidad para recuperar lo perdido y pidió no comprar objetos robados. “Pedimos de corazón que no sean parte de esto: no compren lo robado”, señalaron, en un intento por romper con el circuito de reventa que muchas veces protege a los delincuentes.
Aunque el daño económico no fue grande, el daño social es profundo. “Nos duele porque trabajamos todos los días para sacar a los chicos de la calle. Y nos hacen esto”, lamentaron desde el club. A pesar del robo, Santa Lucía Fútbol Club sigue adelante con sus actividades, aunque con recursos limitados, y convocó a la comunidad a colaborar con donaciones para reponer lo robado y seguir acompañando a sus jóvenes jugadores.
