Una turista argentina fue multada con 500 euros y expulsada de la Fontana di Trevi, en Roma, Italia, la semana pasada, luego de ser sorprendida por la Policía mientras metía los pies en el agua de la famosa fuente, un acto prohibido por las autoridades para proteger el monumento. El hecho quedó registrado en un video que se viralizó en las últimas horas en redes sociales, generando repudio de los usuarios.
El episodio ocurrió en pleno centro histórico de la capital italiana, donde cientos de visitantes se encontraban arrojando monedas, sacando fotos y paseando por la zona. La mujer, acompañada por otra persona, fue grabada mientras estaba descalza y con los pies dentro del agua. Al notar la presencia policial, intentó disimular, pero los agentes se acercaron y le pidieron que se retirara. Tras negarse en un primer momento, finalmente aceptó salir de la fuente.
Según medios italianos, además de la multa económica, a la turista se le prohibió acercarse a otros centros turísticos de Roma durante el resto de su estadía. El incidente reabrió el debate sobre el cuidado de los monumentos históricos y la necesidad de respetar las normas.
La Fontana di Trevi, construida en el siglo XVIII por el arquitecto Nicola Salvi, es uno de los sitios más visitados de la ciudad. Tras su restauración en 2024, se implementó un sistema de visitas más controlado: los turistas deben hacer fila y se permite el ingreso en tandas de hasta 400 personas, entre las 9 y las 21 horas (los lunes y viernes abre a las 11). Después de ese horario, el acceso queda liberado, aunque siempre con estricta vigilancia para evitar daños o incidentes como este.
