El periodismo tucumano está de luto. Se confirmó hoy el fallecimiento de Alberto Calliera, el reconocido humorista tucumano que transformó las miserias de la política local en humor digerible para toda una generación de tucumanos.
Con su clásico saludo “vea, amigo”, Calliera supo forjar una brillante carrera den los medios de comunicación. Trabajó en La Gaceta, en distintas revistas y en programas de televisión del viejo Canal 8 y Canal 10.
El humorista nació en Tucumán y a los 31 años se mudó a Yerba Buena, convirtiéndose en uno de los primeros vecinos del barrio Viajantes.
Su habilidad para hacer humor con la política (y los políticos) vio la luz en 1981 en “La Tarde”, el vespertino que pertenecía a LA GACETA. Desde las primeras viñetas, Calliera ya se perfilaba como un provocador del humor.
Desde un primer momento aclaró que no sabía dibujar, cosa que aprendió de grande. Pero, sin lugar a dudas, su fuerte era la pantalla de tv, su estilo casí único para hablar, sus gestos elocuentes y sus remates que arrancaban carcajadas.
La noticia de su muerte fue difundida por su entorno familiar. Sus restos serán sepultados a las 15 en el cementerio San Agustín
