Contundencia. “Jogo bonito”. Un arquero inexpugnable. Dos centrales que ganaron todo. Nada que decir. El despliegue generoso del San Martín de Diego Cagna fue demasiado para los jugadores decanos pese a su localía y de esa manera, alimenta el sueño del equipo de Ciudadela de cara al “Nacional B”. Un goleador que aparece siempre. Al comienzo para dejar a todos helados: a los 3 minutos Ramón Lentini enmudeció el Monumental.
Lentini también se llevó los elogios de los hinchas santos que siguieron por la radio el triunfo o se emocionaron viendo el partido por internet a través de Facebook del sitio Santo de la Ciudadela. El segundo llegaría con una estupenda definición de Diego Bucci mostrando claramente que no sería una noche más en el Monumental.
El último “Ramonazo” afloraría a comienzo del segundo tiempo, sepultando toda la ilusión del local. La desazón se veía en los rostros preocupados, en la frustración de Juan Manuel “Vasco” Azconzábal y en las explicaciones que intentaban buscar los hinchas mientras se miraban callados, sin respuestas.
Fue 3 a 0 pero pudieron ser más. Como si fuera poco, los intentos de un Atlético desconocido alzaron vuelo cada vez hasta estrellarse contra una verdadera muralla. Un Taborda sólido mantuvo el cero cerrando el arco ante cada ataque “decano”. Así fue ahogando la ilusión de los hinchas que se quedaron mudos casi desde los 20 minutos del primer tiempo.
Después, Diego Cagna elaborando un gran trabajo defensivo a través de los centrales que se enfrentaron a los delanteros “de primera” de Atlético ganando todas: Alexis Ferrero y Luciano González. Ambos sostuvieron una goleada histórica en una noche fría que quedará en el recuerdo de cada corazón ciruja. El vestuario resumió todo: en uno tronó la música de cumbia fuerte. En el otro, había un silencio desolador.
Foto: La Gaceta.
