En Nueva Esperanza, al norte de Santiago del Estero y cerca del límite con Salta, la Policía descubrió una presunta banda de venta de vehículos robados, liderada por dos personas de Tucumán.
La intervención policial se desencadenó después de que se detectara la presencia de un auto robado en Córdoba en esa localidad. Tras verificar la información, las autoridades encontraron otro vehículo con irregularidades en el dominio, denunciado como sustraído en Buenos Aires.
Los residentes de Nueva Esperanza, al enterarse de la operación policial, comenzaron a presentarse con vehículos que habían adquirido del hombre y su hijo, quienes se habían instalado en el área con un foodtruck. Los compradores relataron que les ofrecieron automóviles a precios significativamente más bajos que en otros lugares, pero no cumplieron con las transferencias prometidas.
Estos incidentes revelan un posible patrón delictivo en la región del Noroeste Argentino (NOA), donde organizaciones recibirían vehículos robados de otras provincias para venderlos a precios reducidos. La Policía santiagueña intensificó los operativos y la vigilancia sobre los documentos de los conductores, resultando en el secuestro de 14 vehículos solo en enero.
Además, en Santiago del Estero se están investigando los movimientos del conocido delincuente Sergio Tripolone y su hijo Rodrigo, presuntamente relacionados con el robo de automóviles en la provincia. Sergio, prófugo desde hace años, tiene antecedentes penales por homicidio durante una protesta gremial, mientras que su hijo Rodrigo recientemente fue condenado por robo.
Fuente: La Gaceta
