El policía José María Concha fue una de las víctimas de la delincuencia tucumana en 2017. En el mes de septiembre el cabo murió luego de recibir un disparo durante un intento de asalto en Los Pocitos.
Esta semana, una nueva situación indignante invade a la familia Concha en su pedido de justicia tras conocer que se le brindó la prisión domiciliaria a Franco Vázquez, uno de los asesinos del joven cabo.
Así lo dio a conocer la madre del joven asesinado por delincuentes el pasado 8 de septiembre, en Los Pocitos, durante un asalto. “Necesito que me ayuden. No pueden darle la prisión domiciliaria. Se va a escapar. Yo ya sabía que tiene pensado irse a Bolivia. Me dicen que la medida fue firmada por el juez (Juan Francioso Pisa) y el medico forense. Esto no puede quedar así“, dijo Gladys Concha.
No es la primera vez que la justicia toma medidas que han inquietado a la familia de la víctima. A finales de octubre, el abogado de Vázquez había presentado un hábeas corpus a favor de su cliente, puesto que consideraba que el fiscal, Claudio Bonari, habría dejado vencer los tiempos procesales. El juez Pisa le dio la razón al profesional y ordenó su libertad. Pero fijó una caución personal para que se cumpliera su orden. Tras el revuelo mediático que se armó, la medida dio marcha atrás.
La madre de Concha convocó a una nueva marcha en su pedido de justicia para las 10 de la mañana de este jueves en las puertas de los Tribunales de la avenida Sarmiento.
En la causa también están implicados Patricio Alarcón y una mujer policía, tía de uno de los acusados. Es más, en uno de los allanamientos al domicilio de la miembro de la fuerza se encontró un quiosco de drogas.
